Cómo diseñar un empaque para un producto
Escrito por: Gilberto Avendaño | Febrero 8 de 2024
En la actualidad, los empaques han tomado un papel más protagónico para el consumidor. Ya no son solo para proteger los productos, ahora se busca que estos sean atractivos para el comprador y generen experiencias en los usuarios, que sean capaces de transmitir un sentido y propósito, y ni hablar de la importancia que ha adquirido el impacto ambiental que estos puedan tener.
Existen 10 factores clave a considerar al momento de diseñar un buen empaque:
Conozca el producto y al productor
De nada sirve emplear largas sesiones de trabajo para diseñar un empaque atractivo y funcional y que al final no vaya en línea con lo que el producto quiere transmitir, ya que desde el mismo empaque se está comunicando al cliente qué es lo que la marca está ofreciendo. Eso sí, que la innovación y la originalidad no dejen de lado la capacidad de protección, porque el objetivo siempre será que durante el proceso de logística, el producto llegue en perfectas condiciones.
Branding de la marca
Evite una presentación genérica que pueda confundir al cliente. Por esto, al momento de diseñar su empaque, debe tener en cuenta el branding de la marca para aprovechar la oportunidad de transmitir sus valores y sus características.
Conozca al público
En lugar de centrarnos solo en la estética del empaque, debemos entender a fondo al comprador. Es decir ser consciente a quien va dirigido, identificar lo que valora en un producto, así como la necesidad que necesita resolver al diseñar un empaque que no solo sea visualmente atractivo, sino que también cumpla con sus expectativas y contribuya a una experiencia única. Personalice el diseño para destacar lo que realmente importa para ellos, diferenciando su producto en el mercado.
Establezca los objetivos de diseño
Defina claramente lo que desea lograr con el diseño del empaque. ¿Quiere destacarse en el estante de una tienda, comunicar la calidad del producto o transmitir un mensaje específico? ¿Busca destacarse en las páginas de productos de una tienda online, comunicar la calidad del producto de manera impactante o transmitir un mensaje específico que resuene con sus clientes en línea?
Investigue a la competencia
Analice el empaque de productos similares en el mercado y en el punto de venta. Esto le ayudará a identificar oportunidades para diferenciarse y destacar el producto.
Seleccione materiales adecuados
El material de empaque siempre debe ser el indicado, no es una selección al azar. Este debe tener las especificaciones justas y a la medida del producto. Sin comprometer la integridad del mismo con una especificación muy baja, pero tampoco sobre estructurando el empaque sin necesidad y siempre usando materiales sostenibles. Es un balance hecho a la medida para cada solución de empaque, esto se traduce en el uso responsable y sostenible de materiales para las necesidades del producto, el productor y el cliente. Siempre cumpliendo con sus objetivos de logística, exhibición y experiencia.
Diseñe de manera atractiva
La imagen es clave, el empaque también entra por los ojos. Utilice diseños gráficos impactantes, con colores llamativos e imágenes alusivas al producto y la marca. Recuerde que el protagonista es el producto y su contenido. El diseño del empaque debe ser claro, limpio y fácil de entender. Evitando caer en la saturación de imágenes, colores y de información. Una imagen bien utilizada es la clave para que el producto sea atractivo para el comprador.
Destaque los beneficios
Muestre claramente los beneficios del producto en el empaque. Esto puede incluir características importantes, un “claim” o mensaje del producto o la marca y la calidad que ofrece a los clientes. También es importante no saturar al cliente, manténgalo simple.
Compruebe el diseño
Antes de producir masivamente el empaque, realice pruebas con prototipos para asegurarte de que el diseño funcione y sea efectivo. Un ejemplo es la comprobación a través de las metodologías SMART de Smurfit Kappa: SupplySmart, ShelfSmart y eSmart para llevar a cabo pruebas precisas y que el empaque esté optimizado para toda la cadena.
Cumpla con regulaciones y normativas
Asegúrese de que el empaque cumple con las regulaciones y normativas para el producto, como etiquetado nutricional, advertencias de seguridad, reciclabilidad y como las certificaciones de manejo de fuentes responsables, como la FSC® de Gestión Forestal*.
Crear un empaque exitoso en todos los sentidos y además sorprender a los clientes puede sonar como una tarea complicada, pero con el debido proceso, método y un trabajo disciplinado, podrás alcanzar resultados que con el tiempo le traerán grandes beneficios.
¿Qué nos depara el futuro del diseño de packaging?
Para nadie es un secreto que el mundo evoluciona constantemente y el diseño de packaging no es ajeno a esto. Se prevé que para el final de la década, todos los empaques serán reutilizables o se podrán reciclar de manera rentable para las empresas.
Para lograrlo, se consideran tres aspectos esenciales:
El ecodiseño:
Es un enfoque técnico, creativo y sostenible para desarrollar empaques factibles y deseables. A diferencia del diseño convencional, se considera el ciclo de vida completo del empaque, desde la producción hasta su disposición final. Este enfoque integral busca minimizar los impactos ambientales y se aplica en diversas industrias, de consumo masivo, agrícolas, alimentos, aseo (personal y hogar), moda, hogar, tecnológicos, licores, belleza, construcción entre otros.
Esto es beneficioso en aspectos como:
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Reducción de costos, gracias a eficiencias en los procesos de producción, uso de materiales a la medida y optimizaciones en términos de embalaje, almacenamiento y transporte
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Cumplimiento con regulaciones ambientales que se encuentren vigentes.
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Introducción de diferentes elementos de innovación como, materiales reciclados, biodegradables o de origen orgánico.
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Minimizar la huella de carbono, implementando prácticas que promuevan la sostenibilidad ambiental, eficiencias logísticas y la responsabilidad corporativa.
El aumento del uso del papel como monomaterial:
Como su nombre lo indica, es crear empaques de un solo material, convirtiéndolo en una opción más sostenible y ecológica; esto facilitará su reciclado, además de implicar un gasto menor en términos de materias primas.
Tecnologías de reciclaje rentable:
En la búsqueda constante de prácticas sostenibles, las Tecnologías de Reciclaje Rentable están emergiendo como catalizadores clave en el horizonte del diseño de packaging. Estas innovaciones, que abarcan desde la clasificación visual hasta procesos avanzados, prometen remodelar la forma en que abordamos la gestión de residuos.
Compromiso colectivo:
En esta última parte, se necesita un compromiso de varias partes, fabricantes, usuarios, recicladores y gobierno, con el fin de educar a los consumidores sobre las prácticas correctas para disponer de los residuos restantes una vez se consume el producto.
Todo esto debemos sumarlo a una clara tendencia que ha venido en aumento, especialmente en la etapa post pandemia, donde los consumidores están en búsqueda de marcas y productos que demuestren innovación y un alto compromiso ambiental, hoy por hoy es un aspecto clave al momento de tomar decisiones de compra.
En Smurfit Kappa, nos centramos en innovar en el diseño de empaques tanto secundarios como terciarios. Trabajamos en estrecha colaboración con nuestros clientes para idear soluciones que no solo cumplan con sus necesidades particulares, sino que también generen experiencias sobresalientes para quienes adquieren sus productos.
Nuestro compromiso con la innovación del empaque se enfoca en crear soluciones versátiles y sostenibles que se ajusten tanto a las necesidades del mercado minorista tradicional, como a las demandas crecientes del comercio electrónico.
Esta orientación dual nos permite diseñar empaques que no solo resaltan en las estanterías de las tiendas, sino que también garantizan la protección y presentación óptima de los productos en el mundo digital. Trabajamos de la mano con nuestros clientes para lograr empaques que destaquen y aporten valor en ambos entornos comerciales.
*Código de certificación FSC® CO11320