2024-10-09T00:00:00

¿Qué es el TNFD y cómo funciona?

Escrito por: Ángela María Concha Pelaez | Octubre 9 de 2024

El TNFD es una iniciativa a nivel global que busca proporcionar un marco para que las empresas, instituciones financieras, organizaciones y gobiernos en todo el mundo logren identificar, evaluar y divulgar sus impactos, dependencias y riesgos relacionados con la naturaleza a través de la presentación de informes corporativos.

La crisis de la biodiversidad, el cambio climático y la pérdida de ecosistemas ha puesto en evidencia la necesidad de que las organizaciones y las instituciones financieras consideren su grado de relación con la naturaleza. Es por ello que el objetivo del TNFD consiste en brindar información procesable y medida por la ciencia sobre cuestiones relacionadas con la naturaleza para que esta sirva de orientación sobre cómo las organizaciones pueden integrar tales consideraciones a sus estrategias de sostenibilidad y alinearlas a su operación, aportando así a la toma de decisiones para mitigar los riesgos y aprovechar oportunidades que promuevan la preservación del medioambiente.

¿Qué significan las siglas TNFD?

Por sus siglas en inglés, el TNFD (Taskforce on Nature-related Financial Disclosures) se traduce en español como Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones Financieras relacionadas con la Naturaleza. Este Grupo de Trabajo está conformado por 40 miembros pertenecientes a diferentes instituciones financieras, corporativas y de servicios de marketing, quienes representan 18 países de 5 continentes.

¿Cómo funciona el marco del TNFD?

Con el aporte y respaldo de diferentes organizaciones en el escenario de la conservación y la ciencia, el TNFD define 14 recomendaciones clave centradas en evaluar de forma integral las implicaciones sobre los problemas relacionados con la naturaleza que tienen las organizaciones, orientando así la toma de decisiones y los flujos financieros que tienen estas para obtener resultados positivos que promuevan la sostenibilidad.

De esta manera, el marco del TNFD no crea una nueva normativa de regulación, sino que reúne otros estándares existentes en las normativas internacionales de ESG para elaborar sus recomendaciones, como lo son, por ejemplo, las divulgaciones publicadas por el Consejo de Normas Internacionales de Sostenibilidad (ISSB) y los conceptos claves desarrollados por el Grupo de Trabajo sobre Divulgación Financiera relacionada con el Clima (TCFD), una iniciativa que inspiró fuertemente el desarrollo de este marco.

Así, las recomendaciones del TNFD se centran en cuatro puntos clave que las organizaciones pueden gestionar y desarrollar en la presentación de sus informes. Estos puntos son: dependencias, impactos, riesgos y oportunidades relacionados con la naturaleza. Esto implica identificar cómo las organizaciones dependen de los recursos y servicios naturales y cómo sus operaciones impactan en la biodiversidad y los ecosistemas.

Asimismo, las recomendaciones abarcan evaluaciones de riesgos que incluyen tanto riesgos físicos (como desastres naturales), como riesgos transicionales (cambios regulatorios y de mercado).

Además, el TNFD sugiere ser transparentes en la divulgación de información sobre la naturaleza, estableciendo métricas claras y objetivos cuantificables para monitorear el desempeño ambiental. Para que esta divulgación sea más transparente y abierta, se sugiere entonces que las organizaciones admitan la colaboración con partes interesadas, como comunidades locales y gobiernos, ya que esto puede ayudar a que se comprendan mejor los impactos de sus operaciones y desarrollar soluciones que beneficien tanto a la naturaleza como a las comunidades.

De igual forma, este marco propone adoptar enfoques basados en la ciencia para apoyar la toma de decisiones informadas, incluyendo el uso de métricas para monitorear el estado de los ecosistemas y la adopción de enfoques sostenibles para evaluar el impacto ambiental de los productos y servicios, planteándose objetivos sólidos de acuerdo a las orientaciones de la Science Based Target Network.

Pilares fundamentales del TNFD

El TNFD se construye sobre cuatro pilares clave que proporcionan la base para su marco de trabajo. Estos pilares son:

Gobernanza: Este pilar se centra en cómo las organizaciones manejan los riesgos y oportunidades relacionados con la naturaleza. Aquí, se evalúa si la empresa tiene un gobierno corporativo que integre las cuestiones de naturaleza en la toma de decisiones. La gobernanza es esencial para asegurar que los altos ejecutivos y el consejo directivo estén informados sobre los impactos y dependencias ambientales.
Estrategia: En este pilar, se aborda cómo los riesgos y oportunidades relacionados con la naturaleza influyen en la estrategia general de la organización. Este pilar plantea que las empresas integren la naturaleza en sus estrategias y planificación operativa a mediano y largo plazo, considerando no solo los impactos negativos, sino también las oportunidades para apoyar la regeneración de la biodiversidad. Esto puede incluir prácticas de economía circular, enfoques de restauración ecológica o inversiones en proyectos de conservación.
Gestión de riesgos: Este pilar examina cómo las organizaciones identifican, evalúan y gestionan los riesgos y oportunidades relacionados con la naturaleza. De esta manera, se propone una evaluación exhaustiva de los riesgos físicos, como los desastres naturales y la degradación de los ecosistemas, así como los riesgos transicionales, como los cambios en las regulaciones ambientales o en las preferencias de los consumidores hacia productos más sostenibles.
Métricas y objetivos: El último pilar indaga sobre cómo las organizaciones miden y monitorean su desempeño en relación con la naturaleza. Se espera que las empresas establezcan métricas claras y objetivos cuantificables para rastrear su progreso, resaltando igualmente la importancia de que dichas métricas se basen en datos científicos sólidos. Dentro de este pilar se incluye el monitoreo de indicadores clave de biodiversidad, huella de carbono, uso del suelo y consumo de agua, entre otros.

Importancia del TNFD para las organizaciones y la sostenibilidad

El TNFD demuestra un gran potencial para la sostenibilidad ambiental al buscar conectar los intereses de los sectores financieros con prácticas más responsables con la naturaleza y el medioambiente. A medida que la pérdida de biodiversidad y la degradación de los ecosistemas se convierten en desafíos globales críticos, las empresas, organizaciones e inversionistas enfrentan crecientes presiones para integrar la naturaleza en sus procesos de toma de decisiones.

Para las organizaciones, el marco que ofrece el TNFD para gestionar riesgos y oportunidades relacionados con la naturaleza les permite anticiparse a las regulaciones ambientales emergentes, adaptarse a las preferencias de los consumidores y fortalecer su reputación en materia de sostenibilidad. Al hacerlo, no solo pueden mitigar riesgos financieros, sino también identificar oportunidades para generar valor a largo plazo, por ejemplo, a través de innovaciones en productos sostenibles o mediante inversiones en soluciones basadas en la naturaleza.

Desde la perspectiva de la sostenibilidad global, el TNFD desempeña un papel crucial en la protección y restauración de la biodiversidad. Al promover la transparencia y la responsabilidad corporativa en relación con la naturaleza, el TNFD contribuye a un cambio hacia una economía que respete los límites planetarios. Este enfoque es esencial para asegurar que el desarrollo económico no comprometa la salud de los ecosistemas de los que dependen las futuras generaciones.

Además, el TNFD está alineado con otros marcos internacionales, como los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas y el Acuerdo de París sobre el cambio climático. Por otro lado, también está estrechamente relacionado con el Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal al vincular la necesidad de movilizar recursos para la biodiversidad.

Se vincula concretamente con la Meta 19 de este Marco, la cual establece el objetivo de aumentar significativamente los recursos financieros para la conservación y restauración de la biodiversidad de aquí a 2030. El TNFD, al proporcionar un marco para que las organizaciones evalúen y divulguen sus dependencias y riesgos relacionados con la naturaleza, contribuye a este esfuerzo al incentivar una mayor inversión en la protección de los ecosistemas.

Al exigir a las empresas que reconozcan sus impactos y dependencias de la naturaleza, el TNFD ayuda a canalizar recursos hacia actividades que favorezcan la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad. Esto representa un aporte para la realización de la Meta 19 al apoyar a la consolidación de finanzas sostenibles. Así, el TNFD y la Meta 19 impulsan un cambio en la manera en que las empresas gestionan sus relaciones con la naturaleza, fomentando una mayor responsabilidad corporativa y promoviendo el flujo de capital hacia proyectos que contribuyan a la preservación y regeneración de la biodiversidad a nivel global.

En definitiva, el TNFD representa un paso importante hacia la integración de la naturaleza de manera responsable y sostenible en el sistema financiero global, apoyando el avance de las organizaciones hacia los objetivos globales de sostenibilidad a través de un rol activo. Se espera que al adoptar el marco del TNFD, las organizaciones y empresas lideren el camino hacia un futuro donde la prosperidad económica y el bienestar del planeta vayan de la mano.

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