Resumen
Descubre cómo Bauck, una empresa alemana de alimentos orgánicos con más de 90 años de experiencia, colaboró recientemente con Smurfit Kappa (ahora Smurfit Westrock) para sus necesidades de embalaje. Trabajando juntos para analizar e identificar oportunidades de optimización para el embalaje existente de Bauck, nuestro equipo de diseño identificó ineficiencias en las bandejas de embalaje que se estaban utilizando y propuso un ligero ajuste que reduciría significativamente los residuos de embalaje, las emisiones de CO2 y, en última instancia, aumentaría la cantidad de producto que podían enviar por palé.
El reto
Bauck es una empresa alemana de alimentos ecológicos, compuesta por tres granjas y un molino, dedicada desde hace más de 90 años a la producción de alimentos de alta calidad con certificación Demeter, como muesli, mezclas para pan y harinas. Recientemente, Bauck buscaba un nuevo proveedor de embalaje para mejorar la eficiencia y la sostenibilidad de los embalajes que utilizaba actualmente para sus productos, que a menudo ocupaban un espacio logístico excesivo y generaban importantes residuos de material. Su decisión de optar por Smurfit Kappa (ahora Smurfit Westrock) estuvo muy influida por nuestro enfoque proactivo a la hora de identificar el potencial de optimización de su gama de productos, un factor clave en sus criterios de selección.
Nuestro enfoque
El enfoque de Smurfit Kappa (ahora Smurfit Westrock) comenzó con el análisis de los diseños individuales de los productos de Bauck para identificar dónde había mayor potencial de ahorro, así como cualquier mejora de la sostenibilidad. Como resultado de este análisis, descubrimos que las bandejas que se utilizaban para todos los productos de Bauck tenían un importante potencial de optimización con sólo un pequeño ajuste. Históricamente, las bandejas se diseñaban con lados cortos que creaban un exceso innecesario de material entre ellos. Nuestro equipo de expertos en diseño propuso un ligero ajuste de la inclinación de los dos lados cortos, lo que permitió unir las bandejas onduladas de forma que se redujera significativamente la cantidad de material desperdiciado. También se identificaron otros ahorros mediante ajustes estructurales en las bandejas, lo que permitiría cambiar los europalés por palés industriales, reduciendo en última instancia el tamaño de los palés necesarios para el transporte..
El resultado
Al adaptar el borde inclinado de las bandejas, Bauck ahorra ahora casi 130.000 metros cuadrados de residuos de envases, lo que equivale a una reducción de 21 toneladas de CO2 al año. No sólo esto, sino que Bauck también está reduciendo las emisiones adicionales de CO2 por kilómetro mediante la adaptación del tipo de onda en las tapas de las bandejas. El cambio de ona B a onda S significa que Bauck puede apilar oficialmente un 14% más de mercancías en un palé, reduciendo el número de camiones necesarios en 32 al año. El resultado es un ahorro adicional de 7 toneladas de CO2. Por último, la estabilidad también aumentó en más de 13 puntos gracias al diseño adaptado del embalaje.