La importancia del diseño de envases secundarios
Cuando pensamos en envases, la mayoría de las personas se centran en el envase primario: el contenedor que contiene directamente el producto, como una botella o una lata. Sin embargo, el envase secundario, a menudo considerado como la "caja exterior" o embalaje de tránsito, juega un papel igualmente vital en el trayecto del producto desde el fabricante hasta el consumidor. De hecho, el diseño de envases secundarios puede influir significativamente en aspectos como la percepción de la marca y la eficiencia operativa. En este blog, exploraremos por qué el diseño de envases secundarios es tan importante y cómo impacta tanto a las empresas como a los consumidores.
¿Qué es el embalaje secundario?
El envase secundario se refiere al envase exterior que agrupa un producto individual o combina múltiples unidades de un producto. Su función principal es facilitar el manejo, transporte y exhibición de los productos. Ejemplos incluyen cajas de cartón para contener varias botellas de cerveza, envases para llevar frascos y paquetes a las estanterías de los supermercados, o envases de comercio electrónico para entregar productos directamente a la puerta del consumidor.
¿Por qué es crucial el diseño de embalajes secundarios?
1. Protección y durabilidad
La función principal del envase secundario es la protección. Actúa como un escudo, asegurando que el producto llegue al cliente en perfectas condiciones. Ya sea durante el transporte, en los estantes o en almacenamiento, el envase secundario previene daños causados por manipulación brusca, condiciones ambientales o presión por apilamiento. Un diseño bien pensado también ayuda a evitar devoluciones costosas y quejas, reduciendo la probabilidad de productos dañados antes de llegar al usuario final.
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2. Branding y experiencia de unboxing
En el mercado competitivo actual, la experiencia de unboxing se ha convertido en un punto de contacto crítico para los consumidores. Un embalaje secundario bien diseñado puede mejorar esta experiencia, sirviendo como un medio para comunicar los valores, la estética y la historia de tu marca. Para las marcas de comercio electrónico, en particular, el envase secundario suele ser la primera interacción física que los clientes tienen con la marca, y un diseño creativo y con branding puede dejar una impresión duradera.
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3. Sostenibilidad
La sostenibilidad es más que una tendencia: es una necesidad. Los consumidores son cada vez más conscientes del impacto ambiental de sus compras, y el envase excesivo o derrochador es una gran preocupación. Los embalajes secundarios que utilizan materiales reciclables envían un mensaje claro de que tu marca se preocupa por el planeta.
La economía circular es el núcleo de la industria de envases a base de papel, utilizando materiales renovables, reciclables y reciclados para crear soluciones sostenibles.
- Renovable: los envases a base de papel están hechos de fibras recicladas y de fuentes sostenibles.
- Reciclable: los envases a base de papel pueden reciclarse hasta 25 veces.
- Reciclado: los envases a base de papel tienen la tasa de reciclaje más alta de cualquier tipo de embalaje a nivel mundial.
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4. Eficiencias en la cadena de suministro
Más allá de la estética, el embalaje secundario impacta directamente la logística y la eficiencia operativa. Los envases que son livianos, compactos y apilables optimizan el espacio durante el envío y almacenamiento. Un envase secundario bien diseñado reduce costes de transporte, mejora la organización en el almacén y hace que el transporte sea más seguro. Para empresas que envían grandes volúmenes de productos, pequeñas mejoras en el diseño de los empaques secundarios pueden generar importantes ahorros.
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5. Comodidad para el consumidor
El envase secundario también puede mejorar la comodidad del manejo de productos para los consumidores. Cartones multi-pack, asas fáciles de llevar o cajas resellables facilitan el transporte y almacenamiento de los artículos. Cuando los envases están diseñados pensando en la conveniencia del consumidor, mejoran la experiencia general y aportan valor al producto.
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Mejores prácticas para el diseño de envases secundarios
- Comprender el trayecto del producto: Considera todas las etapas del ciclo de vida del producto, desde la fabricación hasta el momento en que el consumidor abre el envase y cómo puede reciclarse fácilmente después de su uso.
- Alinear con la identidad de la marca: El diseño del envase secundario debe reflejar la personalidad de tu marca. Utiliza colores, logotipos y mensajes coherentes con tus esfuerzos de branding.
- Enfocarse en la sostenibilidad: Da prioridad a materiales como el cartón ondulado, que está hecho de fibras recicladas y de fuentes sostenibles, y puede reciclarse hasta 25 veces, atrayendo a consumidores conscientes del medio ambiente.
- Maximizar la eficiencia: Asegúrate de que el envase sea eficiente en espacio, liviano y fácil de manejar. Esto reduce costes y minimiza el riesgo de daño durante el transporte.
- Cumplir con normativas: Verifica que toda la información necesaria y las regulaciones se cumplan con el diseño del envase, especialmente en industrias como alimentos, bebidas y farmacéutica.
